Luego de la cancelación de la habitual propuesta gastronómica en Semana Santa, atendiendo el panorama actual de prevención por el coronavirus, Roberto Ursino, desde La Siempre Verde, compartió sus puntos de vista sobre esta decisión y la realidad de la comunidad.
“El 9 de marzo habíamos iniciado todos los talleres que tenemos en la institución y cuando se confirmó la suspensión de las clases paralizamos todo. Y días después, junto a la comisión directiva, decidimos suspender la venta gastronómica de Semana Santa”, indicó Ursino.
–¿Ya habían hecho alguna inversión y avanzado desde el punto de vista organizativo?
–Habíamos trabajado en el tema de los presupuestos, pero sin concretar nada. Veíamos que la situación no venía bien y no podíamos arriesgarnos nosotros, ni arriesgar a la gente que se arrima año a año a disfrutar de los productos del mar. Ya teníamos los proveedores, los precios, todo organizado; incluso hasta la cámara. Pero paralizamos todo y no compramos nada. La vamos a pasar por alto y esperaremos hasta el año que viene.
“Estamos viviendo una situación muy difícil. Veo bien el trabajo en conjunto que está llevando a cabo el gobierno y las medidas que se han tomado fueron de forma anticipada. Lo importante ahora es que la gente haga caso y se quede en su casa, sino este esfuerzo no sirve de nada”, aseguró.
“Lo que me preocupa es la situación de las personas que trabajan día a día y llevan el sustento a sus hogares. Hay que trabajar fuertemente desde el municipio para que los vecinos sean atendidos. A mí me ha tocado pasar la crisis del 2001 y las inundaciones, pero esto es distinto”, comparó en relación a su etapa como delegado de la localidad.
“Y con respeto a La Verde, vamos a redoblar esfuerzos para que los talleres prosigan cuando todo esto pase. Es difícil, pero lo vamos a afrontar como hemos hecho con otras situaciones”, cerró Tucho.