“Todos los días hace una cagada nueva, todos los días lo mismo. Ya no podemos pararlo“, indicó Virginia, madre de Agustín Gonzalo Correa (20), más conocido como “El Pifia”, un peligroso delincuente de Ingeniero White que volvió a ser detenido el fin de semana luego de asaltar una vivienda de la localidad portuaria.
La mujer, junto a Carlos, su esposo hablaron con Telefe Noticias y aseguraron que ya no saben que hacer con su hijo.
Virginia le pidió a la jueza Susana Calcinelli que lo encierre. Su padre comentó que cada vez que su hijo le solicita dinero para comprar algo, él se lo da. “Me pide plata para una Coca, o un salamín o cigarros y se lo damos“.
El hombre entre lagrimas se lamentó por la actitud de su hijo y aseveró que él no lo crió así. Asimismo, la madre del “Pifia” pidió disculpas a la comunidad whitense por el accionar de Correa. “Yo no tengo nada que ver, no lo mando a él a robar, lo siento un montón si le robó a la gente de White”.
Por otra parte, Virginia ratificó que es necesario que el joven de 20 años sea internado en algún lugar, de lo contrario, “lo voy a encontrar tirado en una zanja“.
Carlos por su parte, relató que una oportunidad un auto lo quiso atropellar por culpa del “Pifia”.
Finalmente, la madre del delincuente aseguró que la raíz del problema de su hijo es la droga. “Está perdido, no tiene cura“.
Correa fue detenido durante la tarde del sábado después de robar a mano armada en una casa de Canning al 3100. A pesar de que tan solo tiene 20 años, Agustín Correa es un malviviente muy conocido en la localidad portuaria.
Ya en septiembre había sido detenido por la policía, después de robar en los clubes Comercial y Whitense. Al primero que atacó, fue a Whitense, el 26 de agosto. Poco más de una semana después, atacó al verdiamarillo de la misma manera
“El Pifia” fue detenido luego de una persecución policial que terminó en el patio de su casa. Allí, amenazó a los policías que lo seguían con un cuchillo, pero fue reducido. En su poder, además, tenía un arma.
No obstante, a los pocos días recuperó la libertad “por falta de pruebas”. Fue el momento justo que aprovechó el malviviente para tratar de limpiar su imagen. Por eso, él mismo se presentó en los estudios de Radio La Brújula y negó todas las acusaciones en su contra.
Sin embargo, pese a sus afirmaciones, “El Pifia” volvió a hacer de las suyas otra vez el sábado por la tarde, cuando junto a un cómplice que logró escapar, ingresaron por el patio a una vivienda ubicada en Canning al 3100.
Allí abordaron a María Bustamante y a su familia, y los amenazaron con armas. Afortunadamente, un vecino advirtió lo que sucedía y avisó a la policía.
Si bien los malvivientes intentaron escapar por los techos, “El Pifia” no pudo huir y quedó otra vez detenido.
Fuente: Gentileza Telefé Bahía.