El Gobierno decidió flexibilizar la entrega de divisas a algunos importadores que, según informó el Banco Central y el Ministerio de Economía, implicará a partir del próximo miércoles un 30% más del cupo diario asignado a estas empresas. Entre el resurgimiento de presiones cambiarias (el dólar “blue” ya subió un 7% en el mes) y en pos de la estrategia oficial de que la economía llegue a todo vapor para las elecciones, Economía acordó satisfacer, parcialmente, los reclamos del sector importador. La medida apunta principalmente al complejo automotriz (autos y autopartes) y a las fábricas radicadas en Tierra del Fuego del sector electrónico y de línea blanca.
Al respecto se reunieron en el Ministerio de Industria ejecutivos de empresas fueguinas, a quienes les anticiparon que podrán tener acceso en el segundo semestre a u$s 300 millones mensuales para importar piezas, partes y máquinas terminadas. El cupo disponible actualmente era de u$s 230 millones mensuales para sus operaciones. Vale señalar que tanto el complejo automotriz como los fueguinos tienen un cronograma pautado con el Gobierno de autorización de divisas para importar. El esquema contemplaba además de los 230 millones para Tierra del Fuego, unos 340 millones mensuales para el automotriz. Cabe señalar que es el Palacio de Hacienda quien define los sectores y cuántas divisas le libera a cada uno para importar a través de la aprobación de las DJAI.
Tras reunirse con Economía, Alejandro Vanoli, titular del BCRA se comunicó con los referentes de los importadores para adelantarles que “dado el nivel de reservas alcanzado se tomó la decisión de aumentar el nivel de aprobación de giros al exterior para importar a partir del 1 de julio”. Más allá del alivio que esto significa para las tesorerías de las empresas involucradas, desde el sector importador le explicaron al jefe del BCRA que con este cupo se cubría la demanda de las 40 a 50 grandes empresas (además de la automotriz y fueguinos) pero quedaba un importante grupo de pequeñas y medianas empresas sin respuesta que, a su vez, en los últimos meses ha visto aumentar la deuda con sus proveedores externos. Frente a esto Vanoli solicitó un detalle del stock de deuda a fines de junio por sector y por empresa, y las necesidades de aprobación diaria de giros al exterior, para conversarlo con el ministro de Economía Axel Kicillof.
Hay que recordar que según estimaciones de la Cámara de Importadores la deuda de todo el sector (grandes y pymes) con el exterior a fines de 2014 era de u$s 4.600 millones y al cabo del primer trimestre de 2015 había crecido a u$s 6.800 millones. Por lo visto en abril y mayo, donde el Gobierno consiguió un mayor flujo de divisas por mayores liquidaciones de los exportadores, colocaciones de deuda, y swap con bancos centrales, lo cual se tradujo en un mayor nivel de aprobación de giros al exterior, los importadores calculan que el stock de deuda se redujo en unos u$s 1.000 millones.
De acuerdo con datos oficiales, en abril sectores como el automotriz, electrónico, químico, comercio y otros recibieron casi u$s 5.000 millones para cumplir con sus compromisos externos. Además, la última información del sector externo del INDEC muestra que en mayo las únicas importaciones que no cayeron fueron las de bienes de capital y piezas y accesorios.
De modo que los nuevos cupos para los importadores apuntan principalmente a garantizar el abastecimiento de materias primas, insumos y accesorios para apuntalar el nivel de actividad. El resto de las divisas autorizadas irán a reducir la deuda existente. Por ejemplo, en el caso de los fueguinos se estima que, en términos generales, de los 300 millones, unos 235 millones irán a la operación y el resto a cancelar deuda. En el caso de las automotrices y autopartistas lo que queda para reducir deuda es menor. Está claro que las empresas beneficiadas por esta flexibilización deben no sólo cumplir con los planes de inversión y de producción pautados, sino también con el mantenimiento de las dotaciones de personal.
Para consensuar objetivos, los secretarios de Industria, Javier Rando y de Coordinación Económica y Mejora de la Competitividad, Mariana González y los subsecretarios de Industria, Stella Maris Ayala Escobar y de Competitividad del
Ministerio de Economía, Nicolás Bonofiglio, tuvieron encuentros individuales con los ejecutivos de las fueguinas BGH, Brighstar, Garbarino, New San, Carrier, Iatec, Electrofueguina, Aires del Sur, Solnic, Fapesa, Radio Victoria Fueguina, Coradir y KMG Fueguina.
En todo este entramado, deben tenerse en cuenta las expectativas de devaluación, que influyen directamente en la demanda de divisas para importación. Dado que cuanto más se acerque la fecha de las elecciones, ante algún salto cambiario, los importadores querrán no sólo adelantar operaciones sino cancelar lo más posible el nivel de endeudamiento con los proveedores externos. Todo dependerá del flujo de liquidación de los exportadores y si Economía logra concretar alguna nueva colocación de deuda en moneda extranjera, además de cómo se comporte la demanda de divisas del público.
Fuente: ambito.com