l gobierno de Mauricio Macri dio hoy un paso fundamental para solucionar el cuello de botella que impide el aumento de la producción en Vaca Muerta: lanzó la licitación pública para la construcción del gasoducto que conducirá el gas extraído de esta cuenca neuquina hasta la provincia de Buenos Aires.
A dos semanas delas elecciones primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO), se llama a licitación pública para “la prestación del servicio de transporte de gas natural que contempla como obligación el diseño y la construcción de un gasoducto que conecte Vaca Muerta con la localidad de Salliqueló y con el Gran Buenos Aires y el Litoral”.
El llamado a licitación se realizó a través de una resolución de la Secretaría de Gobierno de Energía, publicada en el Boletín Oficial. El objetivo oficial es que la construcción de la primera etapa del gasoducto esté completa para el invierno de 2021, lo que permitirá reemplazar Gas Natural Licuado (GNL) -que aún ingresa por el puerto de Escobar- por producción doméstica por unos US$240 millones anuales.
Para este primer tramo se requerirá una inversión de US$800 millones (la obra total costará unos US$2000 millones). “El Gobierno puede poner US$400 de deuda del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) a tasa de mercado, la agencia estatal estadounidense OPIC daría un crédito por otros US$200 millones y el resto, la empresa o el consorcio que resulte adjudicado”, precisaron fuentes oficiales.
El nuevo gasoducto tendrá una capacidad inicial mínima de 15 millones de m3/día en una primera etapa, podrá ser ampliado en sucesivas etapas hasta 40 millones de m3/día, acompañando el desarrollo armónico de la producción de Vaca Muerta y la demanda futura de gas natural del país.
En cuanto al trazado, este nuevo sistema de transporte se extenderá por aproximadamente 570 kilómetros desde las cercanías de la planta de tratamiento de Tratayén, provincia Neuquén, hasta la planta compresora Saturno, en los alrededores de la localidad bonaerense de Salliqueló, para luego continuar por otros 470 kilómetros hasta las cercanías de la también bonaerense San Nicolás.
El anuncio implica un impulso más para la gran apuesta energética del Gobierno, que ya empezó a dar sus frutos: tal como publicó LA NACION hace días, e l mes pasado se produjo un total de 140 millones de metros cúbicos por día, lo que significó un crecimiento interanual del 5,8% y representó la mayor producción de gas en once años.
Según destacan en el Gobierno, entre 2006 y 2013 la Argentina pasó de tener un superávit comercial energético de US$6100 millones al año a un déficit de US$6900 millones, también por año. El año pasado, el déficit fue de US$2300 millones, y este año se espera estar cerca del equilibrio a nivel comercial.
De hecho, en el primer semestre la balanza comercial fue negativa en solo US$126 millones, cuando en el mismo período del año pasado el déficit había superado los US$1000 millones.
La última obra grande del sistema troncal de transporte de gas fue el llamado Gasoducto del Nordeste, que había sido anunciado por el gobierno de Néstor Kirchner en noviembre de 2003, previéndose un plazo de tres años para su finalización. La traza se había diseñado para traer gas importado desde Bolivia hasta la provincia de Santa Fe, pero igual que con otras obras de esa etapa recién fue concluida el año pasado. Además, no se había tenido en cuenta la producción de hidrocarburos no convencionales en Vaca Muerta, que ahora permitirá abastecer el mercado con fluido local. Esa fue la causa por la que la administración Macri desistió de completar el último tramo entre Salta y Formosa.
Fuente: La Nación