Ayer por la mañana soltó amarras desde la dársena de la Base Naval Puerto Belgrano el destructor ARA “Almirante Brown”, el cual se destacó a la zona de búsqueda del submarino ARA “San Juan”.
La zarpada fue presenciada por el Comandante de la Flota de Mar, Contralmirante Julio Guardia, y el Comandante de la División de Destructores, Capitán de Navío Alberto Cohen, entre otras autoridades navales.
El buque insignia de la Flota de Mar efectuará el relevo de la corbeta ARA “Espora” como buque de apoyo a las operaciones del navío “Seabed Constructor” de la empresa estadounidense Ocean Infinity, que desde el pasado 9 de septiembre se halla desarrollando la búsqueda subacuática del submarino desaparecido.
El “Seabed Constructor” lleva siete días de búsqueda científica, efectuando relevamientos y análisis de diferentes espacios y contactos. La tripulación cuenta con unos 40 marinos y técnicos, a los que se suman tres oficiales de la Armada Argentina como observadores y cuatro familiares de los tripulantes del submarino como veedores.
La corbeta “Espora”, por su parte, había zarpado de Puerto Belgrano el pasado 7 de septiembre.
CADETES A BORDO
También, como parte de su formación profesional, embarcaron en el destructor “Brown” 12 cadetes de 4° año de la Escuela Naval Militar (ESNM) a cargo del Teniente de Navío Luis Alejandro Ficosecco, Jefe de 4° año del establecimiento, quienes desarrollarán prácticas durante la navegación.
“Cuando zarpa una unidad de la Flota de Mar lo que se intenta desde la ESNM, como parte del proceso de instrucción y adiestramiento de los cadetes, es embarcarlos para efectuar navegaciones que a ellos les resultan muy productivas, dado que ven en la práctica lo que estudian en el aula. Esto les otorga una conciencia real del porqué estudian las materias que estudian”, destacó el Teniente Ficosecco.
Respecto a las actividades que efectuarán durante los días de mar, el Jefe de 4° año aclaró: “Se van a dividir en tres grupos de guardias rotativas, de la misma manera que lo haría un oficial del buque. Allí se desempeñarán como ayudantes del Oficial de Seguridad Náutica y, como esta unidad por sus capacidades nos permite tener un adiestramiento más complejo, van a efectuar guardias en la Central de Información de Combate, que si bien en su formación de escuela no lo ven, es lo que van a realizar ni bien arriben a una unidad ya egresados”.
Por su parte, el cadete de 4° año, brigadier principal Andrés Nahuel Testa, se mostró muy entusiasmado por la posibilidad de volver a navegar en un destructor –lo había hecho en el verano en el “Sarandí”–, esta vez con sus compañeros de División.
“Es una experiencia única y muy útil a nuestra formación poder embarcar en este tipo de buques, con sistemas complejos, donde podemos aplicar lo que estudiamos. Vamos a estar en todas las maniobras que la unidad efectúe en el mar, así que podremos conocer en profundidad lo que es la vida a bordo y sacar el mayor provecho”, afirmó.
Al consultarlo sobre sus preferencias respecto a dónde le gustaría estar destinado luego de su egreso, el cadete Testa no dudó: “En cualquier destructor o corbeta de la Flota de Mar. Si eso no se diera, me gustaría también alguna lancha en Ushuaia”.
Luego de los días de mar, los cadetes retornarán a la ESNM para culminar el último trimestre de formación.
Fuente: Gaceta Marinera