El gobierno nacional está llevando a cabo hoy en todo el país la segunda edición de las pruebas Aprender, esta vez sin la interrupción de las clases. Se trata de un operativo nacional de evaluación, que busca medir el nivel de conocimientos de todos los chicos de sexto grado de primaria y del último año de la secundaria. Gremios docentes manifestaron su rechazo a la evaluación y, en algunos casos, convocaron a un paro o a boicotear la prueba.
Por medidas similares de los gremios y algunos docentes, además de factores climáticos en determinadas regiones, las pruebas Aprender no tuvieron la respuesta esperada el año pasado en algunos distritos, como Capital, Neuquén y Santa Cruz.
Esta segunda edición de Aprender es tomada a 1.210.620 estudiantes, que son evaluados por 92.730 docentes de 31.300 escuelas públicas y privadas de todo el país. El estado invirtió 380 millones de pesos para el operativo. Los resultados se conocerán a principios de marzo de 2018.
Este año hay una novedad importante. Además de medir cuánto saben los alumnos de 6° grado en Ciencias Naturales y Ciencias Sociales, y los del último año de la secundaria en Lengua y Matemática, por primera vez mide cómo escriben los chicos.
Se hace a través de una prueba muestral en 4° grado de la primaria en la que los chicos deberán producir un texto. “Ya sabemos que la mitad de los estudiantes terminan la escuela sin comprender lo que leen, pero también tienen dificultades para expresarse. Queremos intervenir desde que son chicos para que lleguen al secundario sabiendo escribir bien”, había explicado el ministro de Educación Alejandro Finocchiaro hace dos semanas, cuando presentó el nuevo operativo.
La prueba de escritura se hace a 7.000 estudiantes de 220 escuelas y los resultados serán representativos de todo el país, afirman las autoridades. A los chicos se les dará un texto de un autor consagrado y deberán continuar con la narrativa.
Otra novedad de este año es que el cuestionario de contexto que se les hace a los directores, esta vez vendrá con una nueva pregunta que apunta a conocer cuáles creen que son las fortalezas y debilidades de la escuela secundaria, para incorporar al proyecto de reforma que avanza en todo el país.
Las críticas de los gremios
Miguel Duhalde, secretario de Educación de Ctera, le dijo a Clarín que mantienen la misma posición que el año pasado: de rechazo a las pruebas. “Ctera no se opone a la evaluación, nosotros como docentes evaluamos siempre. Nuestro rechazo es al tipo de dispositivo, que después es usado para tomar medidas educativas. Son pruebas estanadarizadas, de multiple choice, que no deja ver el proceso de enseñanza que pasa en las aulas”.
Duhalde anticipó que no van a boicotear la prueba. “Somos muy respetuosos de los compañeros. No queremos perjudicar a ninguna docente. Somos una federación y cada provincia ha tomado una decisión distinta”, afirma.
Fuentes del gremio UTE, mayoritario en Capital, coinciden con esta visión. “El planteo es el mismo: estas evaluaciones no sirven, o en todo caso sirven para justificar políticas que se van a tomar. Además, ya hay países que están pensando en abandonar pruebas estandarizadas como Pisa, porque se termina enseñando para esas pruebas”, le dijeron a Clarín. UTE tampoco tiene pensado llevar a cabo ninguna medida especial de protesta, sino “acompañar a la comunidad educativa” en las acciones que tomen.
El gremio SADOP, de los docentes privados, también rechazó en un comunicado las pruebas Aprender. “Al estandarizar la evaluación se instaura una escenificación de los resultados, presentado mediáticamente en términos generales, sin profundizar ni resolver los problemas centrales de la educación ni su calidad. ”, escribieron en un comunicado.
En tanto, los gremios ligados a la izquierda se muestran más combativos. Suteba de La Matanza, por ejemplo, llamó a una “jornada de lucha”, que incluye “paros, movilizaciones y otras actividades”. “Los operativos de evaluación externa y estandarizada apuntan a “construir” datos sobre los cuales justificar el ajuste sobre la educación y el ataque a los docentes. Aprender es un nuevo episodio para que el gobierno justifique los subsidios a las escuelas privadas, y siga justificando la implementación de la reforma de la escuela secundaria y los institutos terciarios, en sintonía con la era de la reforma laboral: estudiantes a trabajar gratis, contenidos sometidos a las necesidades empresarias”, consideraron en un comunicado.
El gremio Ademys, de Capital -también alineado con sectores de izquierda- convocó a los padres a “no mandar a los hijos de sexto grado” hoy a la escuela o, en todo caso, “mandar la no autorización de realizar la evaluación Aprender”.
Lo gremios de Santa Cruz también convocaron a un paro para el día de hoy. En esa provincia este año hubo más de cien días de huelga docente.
Fuente: Clarin