Por primera vez en 25 años, el Banco Central (BCRA) tiene previsto lanzar una convocatoria para sacar un billete de circulación: el de dos pesos.
La entidad que preside Federico Sturzenegger dará seis meses para completar la operación. Cumplido el plazo, los billetes que llevan la imagen de Bartolomé Mitre dejarán de tener validez legal. Voceros del BCRA no desmintieron ni confirmaron la información al ser consultados por LA NACION.
El billete de dos, sin embargo, lejos está de tener el poder de compra que tenía cuando salió en 1992, cuando equivalía a dos dólares. Al tipo de cambio actual, araña los 11 centavos de dólar.
Pero, más aún, según destaca el economista Nicolás Bridger, de la consultora Prefinex, desde 1992 hasta la fecha el poder de compra del billete se erosionó con una inflación del 3490%. En otras palabras, el billete con la imagen de Bartolomé Mitre compraba en 1992 lo mismo que compran hoy casi 70 pesos.
“El billete de dos pesos no tiene mucha utilidad hoy por hoy, con la inflación que ha habido”, subrayó Bridger. “Si lo quieren retirar de circulación, me parece bien; lo que tiene que hacer el Banco Central igual es bajar la inflación”, agregó.
Según los últimos datos disponibles en el BCRA, hay 415,1 millones de ejemplares con la figura de Bartolomé Mitre en el anverso y el Museo Mitre en el reverso. En los últimos años, su participación en la familia de los pesos se fue licuando, al igual que la del resto de billetes de baja denominación, dado que por la alta inflación la Casa de Moneda -y también la imprenta Ciccone- imprimían casi exclusivamente billetes de $ 100.
También son una de las series más deterioradas. Quienes conocen del tema aseguran que se debe renovar cerca del 30% de una serie de billetes cada año para reemplazar las unidades deterioradas.
Cero costo para el BCRA
Así y todo, la de dos es aún una emisión cinco veces más grande que la de billetes de 20 pesos, superior a la de 50 y apenas más baja que las de cinco y diez pesos.
En la línea técnica del BCRA, no obstante, descuentan que, dado su escaso valor de compra, serán pocos los que finalmente terminen siendo canjeados por monedas.
“Operativamente está bien cambiar un billete de mucho uso, además que la moneda para reemplazarlo ya está -opinó, por su parte, el ex director del BCRA Carlos Pérez-. Y contablemente al Banco Central alguna ganancia le va a dejar, porque lo que va a canjear va a ser menos de lo que tiene reflejado en el pasivo monetario, porque hay muchos billetes que se rompieron, habrá gente que lo quiera guardar para colección o que directamente no se va a tomar el trabajo de canjearlos”.
A fines de septiembre pasado ya había en circulación 567 millones de monedas de dos pesos. El BCRA, además, prevé presentar una nueva serie de monedas de dos el año próximo, junto con nuevas monedas de cinco y de diez pesos.
El periplo del billete de $2
Un cuarto de siglo de vida
El billete de dos pesos surgió en 1992, cuando, con el comienzo de la convertibilidad, se reemplazó el austral por la familia de los pesos
El peso de la devaluación
Cuando empezó a circular, el billete equivalía a dos dólares. Al tipo de cambio actual, apenas alcanza los 11 centavos de dólar
Poco poder de compra
El de $ 2 es el billete de menor denominación. Su poder de compra se deterioró en 25 años como consecuencia de una inflación acumulada del 3490%. Para comprar los mismos bienes que en 1992 se compraban con el billete de Bartolomé Mitre se necesitan hoy $ 70. Desde 2011 convive con la moneda del mismo valor, que seguirá circulando.
Fuente: La Nación