Actualmente, 6 de cada 10 usuarios vuelcan información personal en la nube, aplicaciones y redes sociales, exponiéndose diariamente al robo de sus datos. ¿Instalar un antivirus? ¿Configurar la privacidad en las redes sociales? ¿Crear una contraseña compleja? ¿Qué conviene hacer para evitar el acceso ilegal a nuestros mensajes y contenidos?
“A pesar de seguir los requerimientos básicos de seguridad, la mayor parte de los usuarios expone sus datos, bien por desconocimiento o por exceso de confianza, y ponen en constante peligro su seguridad informática”, indicó Fabián Portantier, coordinador de la Carrera Seguridad Informática en Educación IT.
Para garantizar la privacidad de la información, el especialista recomienda tomar una serie de medidas que aseguran los datos alojados en PCs, notebooks, smartphones y tablets.
Actualizarse es clave
Las apps de nuestros dispositivos pueden actualizarse de forma manual o permitir que se actualicen automáticamente. Si mantenemos las apps actualizadas, se podrá acceder a las funciones más recientes con mejoras de estabilidad y seguridad. Esto permite solucionar las fallas y errores de versiones anteriores, como los que registran la protección de datos, por ejemplo.
Recientemente WhatsApp activó la encriptación de extremo a extremo de las comunicaciones de sus usuarios para que sólo quien envía y quien recibe pueda ver el contenido. Si la aplicación no es actualizada, no se podrá contar con ese beneficio.
La privacidad se cuida en casa
Los bares y locutorios ofrecen acceso rápido y barato a redes WIFI o a una PC con internet, pero no sabemos quién puede acceder a ese dispositivo, ni cuáles son las medidas de seguridad que posee. Por lo tanto, nunca se deben ingresar datos privados ni acceder a servicios autenticados, como email, redes sociales y homebanking desde ese tipo de dispositivos.
En el caso de las redes domésticas, se recomienda cambiar la contraseña del WiFi periódicamente, como mínimo, cada dos meses.
No es con todos
Aunque parezca engorroso, es importante leer los términos y condiciones antes de instalar una aplicación o servicio, para saber si estamos dándole permiso para almacenar nuestros datos en la nube. Si esto ocurre, el servidor se convierte en el “dueño” de los datos y el usuario pierde el control de su información. Además, es primordial configurar la privacidad de las publicaciones en redes sociales. Actualmente, todas las redes permiten realizar ajustes personalizados para resguardar los contenidos e incluso, algunas como Facebook, dan la opción de establecer permisos específicos para cada actualización de estado.
No todo lo que brilla es oro
¿De dónde proviene el archivo que me enviaron? ¿Es seguro? Una de las principales formas de engaño y robo de datos es enviar a los usuarios archivos, formularios, y solicitudes de contacto a través de perfiles y cuentas falsas. En este sentido, el especialista de Educación IT aconseja que “lo mejor es no abrir archivos de dudosa procedencia ni aceptar en redes sociales a personas desconocidas. Es ideal no responder a mensajes que soliciten información confidencial, aunque digan ser de entidades de confianza, como el banco, por ejemplo”.
Utilizar aplicaciones seguras
Para asegurarse de que una aplicación está libre de virus y malware (software malicioso), lo mejor es chequear si tiene buena reputación, si fue desarrollada por empresas de confianza, y si además, es utilizada por muchos otros usuarios. Existen sitios web de descarga gratuita de programas que engañan a los usuarios y al descargar la aplicación se ejecutan de forma oculta contenidos maliciosos que destruyen o que se apropian de los datos almacenados
¿Cómo crear una buena contraseña?
“Las contraseñas más robustas y complejas son aquellas que combinan mayúsculas, minúsculas, símbolos y números”, sostuvo Portantier y agregó: “No se recomienda utilizar la misma contraseña en todos los servicios ni incluir fechas de nacimiento, aniversarios, números de teléfono o fragmentos del DNI”. En el caso de sospechar que una contraseña haya sido comprometida, lo ideal es cambiarla al instante.
¡Bendito seas back up!
Un virus, un error humano, una falla en el dispositivo podrían borrar nuestros datos. Por eso es importante que siempre se realicen copias de seguridad de la información en medios de almacenamiento extraíbles, como DVD regrabables, discos externos o Pendrives USB. A la vez, podemos contar con programas que realicen backups automáticos sin que sea necesaria ninguna intervención por parte del usuario para su ejecución.
Fuente : El Cronista