A un mes de realizar un viaje importante de capacitación e intercambio de conocimientos, el Sub-oficial Rubén Paredes, miembro del Cuerpo de Bomberos, anticipó algunos puntos importantes de su experiencia en la 121ª entrega de IngenieroWhite.Com, por La Brújula 24.
«El 20 de abril salimos para Buenos Aires, donde haremos una escala previa, y el 22 ya vamos a estar en Cali, Colombia. El motivo del viaje es un intercambio con agentes de bomberos en temas relacionados con emergencias químicas y manejo de material peligroso, con el objetivo de compartir clases teóricas y prácticas durante casi una semana», indicó Rubén.
«Viajo dentro de una comitiva a nivel nacional, con alrededor de 25 personas, y será mi primera experiencia internacional. Dentro del país, como instructor, recorrimos varias provincias, como Río Negro, San Luis y Jujuy, para bajar el mismo lineamiento a la hora de actuar», amplió.
–Más allá de los aportes que puede ofrecer este viaje, ¿es un tema que dentro del cuartel ya conocen en profundidad?
–Por supuesto, el tema a disertar lo conocemos y la idea es generar más prácticas con estos cursos internacionales de operaciones con materiales peligrosos. Estamos compenetrados con el tema de emergencias químicas y hace más de 10 años que estamos trabajando en el tema, con equipamiento de primera generación, como trajes encapsulados que permiten no tener contacto con el exterior, y capacitaciones permanentes.
–¿Cuáles son los primeros tips a tener en cuenta a la hora de actuar en un siniestro de este estilo?
–Lo primero que se refuerza y se enseña es la identificación del producto. Se hace hincapié en reconocerlo como primera respuesta antes de iniciar la operativa. A partir de ahí se efectúa el desarrollo del plan de emergencia. Por eso, es fundamental la identificación.
Su vínculo con los bomberos
«Tengo 39 años y llevo 17 como bombero. El que plantó la semilla fue mi abuelo Alejo Benítez, quien siempre me contaba anécdotas sobre los bomberos. Entré al cuerpo en el año ’95 y, luego de un parate por cuestiones personales, desde el 2000 estoy en forma ininterrumpida. Si te gusta, esto no lo podés dejar», aseguró Paredes, quien vive frente al destacamento de Villa Ressia.
«Mi primera intervención fue un 19 de enero y estuve 3 días haciendo desagotes luego una lluvia de verano muy intensa. La sirena es algo muy particular, cuando suena me sube la adrenalina por todo el cuerpo, se me pone la piel de gallina y me agarran hasta ganas de llorar. Es algo impresionante», reconoció.
«¿Cómo comenzó mi relación con las emergencias químicas? Fue a fines del 2000, luego de unas charlas informales con Luis Siliquini, quien la tenía muy clara en estos temas. A partir de ese momento empecé a perfeccionarme con el paso del tiempo», explicó.
«Cuando entré a la institución era otra situación, otra cosa. Yo pienso que uno solo se da cuenta si esto le gusta o no. La primera depuración llega pasados los primeros 4-5 meses de capacitación, y luego, cuando uno llega a los 3 años de servicio. Después de eso, salvo cuestiones personales, es raro que alguien no siga», explicó.
El equipamiento
«En el destacamento, integrado por 14 bomberos, contamos con una Toyota 2015 destinada a incendios forestales, y una Ford que se emplea para rescates, primeros auxilios e incendios de casas. Si hablamos del tema de emergencias químicas, el cuartel está a la altura de lo que se necesita, con certificaciones y equipamiento de primera. Los bomberos es una institución que va a cumplir 110 años y ya saber lo que tiene que hacer, con una inercia entre comisión y jefatura prácticamente sin errores», concluyó.