No producen una sola molécula de gas, pero son los grandes ganadores del negocio de los hidrocarburos. Los “traders” –comercializadores en inglés– se convirtieron en las estrellas del sector: cuando las acciones y ganancias de las petroleras se derrumbaban de la mano de la caída del crudo, este puñado de compañías ostentaban números positivos de la mano del boom del gas natural licuado (GNL), un combustible seguro, menos contaminante y desde hace dos años también barato.
Argentina no fue la excepción. Según una estadística de compras de GNL publicada por el Ministerio de Energía, casi el 60% del recurso que ingresa por los puertos Bahía Blanca y Escobar fue proveído por algún trader internacional.
Al igual que en los últimos años, encabezó el ranking por volumen la firma GNA, el brazo comercializador del grupo español Gas Natural Fenosa. Es uno de los principales traders mundiales y entre sus accionistas está Repsol y el grupo Caixa.
El segundo lugar fue para el grupo holandés Trafigura, que tiene su base regional en Uruguay, y es uno de los principales comercializadores de materias primas del mundo. El trader global amenaza ahora con quedarse con el podio en 2017, luego de que se adjudicara 11 de los 17 barcos que licitó Enarsa para el invierno que viene.
El listado de traders se completa con Vitol y Glencore –junto con Trafigura los tres pesos pesados a nivel global– y Cheniere. Estos dos últimos consiguieron 5 barcos para el invierno que viene, lo que hará incrementar su presencia en el mercado local en los próximos meses.
Pero los grandes jugadores del upstream global no se perdieron el negocio argentino, muy atractivo hasta hace un par de años y ahora en cierto declive debido a la mayor producción local y la caída de la demanda local.
Las petroleras resisten
En tercer lugar del ranking aparece la rusa Gazprom y en el quinto la británica BP, socia local de los hermanos Bulgheroni. La primera se convirtió en un actor de relevancia en el último tiempo en el marco de una mejor relación bilateral entre ambos países. Inclusive, se espera que la productora pueda asociarse a operadores locales para el desarrollo de no convencional en la región.
El sexto proveedor es Shell, empresa de la que proviene el ministro de Energía Juan José Aranguren y de la cual era accionista hasta hace algunos meses atrás, cuando tuvo que vender sus tenencias frente al cuestionamiento por posible conflicto de intereses. La firma angloholandesa compró hace poco al grupo BG, con lo cual se convirtió en el principal proveedor mundial de GNL. En la lista figura también la estatal italiana ENI. (DIARIO RIO NEGRO)
Los números
11 de los 17 barcos de GNL que licitó el gobierno nacional quedaron en manos de Trafigura.
11% del recurso que importa el país viene de Estados Unidos tras la revolución del shale.
Fuente: nuestromar.org